Los vehículos eléctricos constituyen unas de las principales piezas, además de indispensables, para el logro de ciudades sostenibles.
La densidad de población en las ciudades requiere acciones para un crecimiento sostenible económica y medioambientalmente, con un propósito claro de mejorar la calidad de vida de sus habitantes, Este es el principal reto y la razón por la cual la sociedad reclama ciudades más inteligentes (Smart Cities).
La Unión Europea proyecta la eliminación de automóviles que utilicen combustibles tradicionales provenientes del petróleo de forma progresiva, pasando por reducir la mitad de la flota automovilística con carburantes convencionales hasta el año 2030, como paso previo a su total sustitución en el año 2050 (se estima que en el año 2050, mas del 70% de la población mundial vivirá en las grandes ciudades). Además la UE propone que el transporte de mercancías en los principales núcleos urbanos quede libre de emisiones de Dióxido de Carbono y otros gases contaminantes.
Todos este planteamiento de la Unión Europea viene dado por el elevado índice de contaminación que se detecta en las grandes urbes, reforzado por la emisión de óxido nitroso, partículas sólidas y contaminación acústica.
El coche eléctrico, se constituye como la solución principal de movilidad en el entorno urbano, sin menospreciar los avances tecnológicos en los motores gasolina y sobre todo diesel, aunque si queremos reducir en un 90% las emisiones de CO2 y otras partículas contaminantes en este entorno, son necesários vehículos con "cero emisiones".
Para lograr mejorar estos índices es necesario un plan que impulse la renovación del parque de vehículos con combustibles fósiles, los más contaminantes, y un apoyo especial a los vehículos de cero emisiones como los coches eléctricos.
A pesar de que el coche eléctrico se terminará imponiendo, ante la juventud de dichos vehículos, la autonomía, el punto de carga y el precio de este tipo de vehículos, son las principales preocupaciones a la hora de decantarse por un tipo de vehículo u otro entre los conductores. La mitad de los potenciales clientes adquirirían estos automóviles si costaran menos que los de motores de combustión.
No debemos olvidar las importantes ventajas que tienen los coches eléctricos, entre las que se encuentran:
- Ahorro en consumo, 1,5€/100Km frente a unos 7€/100Km motores de gasolina.
- Ahorro en mantenimiento, al no tener ni aceites, lubricantes, menos filtros y un escaso desgaste de frenos y ausencia de transmisiones mecánicas.
- Eficiencia energética de un coche eléctrico es del 60% frente al 20% de los motores convencionales.
- No emiten CO2 y sus motores son totalmente silenciosos.
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